Mientras hay destrucción de empleo, más de un 40 % de paro entre los jóvenes y en algunas comunidades llega al 50 %, pensiones que rozan la miseria o pobreza, desahucios de viviendas, recortes en los servicios básicos y fundamentales de la sociedad... la banca en general se forra y gana grandes cantidades de dinero sin disimulo y sin pudor.
Nunca ha existido; pero hoy no existe ni ética, ni moral en la banca en general.
Es un error censurar y quitar la palabra. Cuando se prohíbe la palabra significa que la conciencia está muy poco limpia.